El agua es el principal problema social y ecológico del siglo XXI. Todas las partes interesadas reconocen los importantes desafíos a los que nos enfrentamos para hacer que los derechos humanos al agua y al saneamiento sean una realidad y para gestionar nuestros recursos hídricos de forma equitativa y sostenible.
Aunque el agua se gestiona principalmente a nivel local, la crisis del agua es GLOBAL: toda la comunidad internacional está preocupada. El Foro Mundial del Agua, que se desarrollará del 21 al 26 de marzo de 2022 en Dakar, es un hito en el camino hacia la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua de marzo de 2023, donde se reunirán todos los Estados.
Nuestras recomendaciones a los Estados y a la comunidad internacional:
Por eso, las ONG miembros del Efecto Mariposa piden una respuesta global a la crisis del agua.
Son necesarios 5 cambios políticos concretos:
Nuestro proceso:
Estas demandas son el resultado de un proceso de incidencia participativa llevado a cabo durante casi un año por la coalición internacional de ONG Efecto Mariposa. Este proceso, realizado desde el nivel local hasta el global, ha movilizado a más de 200 participantes de la sociedad civil del sector del agua de los 5 continentes.
Nuestros mensajes se elaboraron mediante una consulta a los miembros de la red y 6 talleres en línea coordinados por las redes regionales de la sociedad civil del agua, cuyos resultados detallados se recogen en una síntesis.
Nuestras propuestas se reúnen en este documento de posición política.
Con la proximidad del Foro Mundial del Agua y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua a un año vista, es de esperar que se produzca una oleada mundial de acciones por parte de los Estados para hacer frente a la crisis del agua.
Proceso liderado por :
Apoyado por :
Del 22 al 24 de marzo de 2023 se celebrará en Nueva York, pro primera vez en 46 años, una conferencia intergubernamental de la ONU dedicada a abordar los problemas mundiales del agua. Se trata de una oportunidad única para reunir a los Estados y a la comunidad internacional en torno a nuestro recurso más preciado y finito "el agua" y darnos la oportunidad de resolver la crisis del agua.
El agua es esencial para todos los aspectos del desarrollo, siendo un motor fundamental para un mundo igualitario y pacifico, y siendo la clave para garantizar nuestra supervivencia. Y, sin embargo:
Para hacer frente a los acuciantes desafíos del agua y hacer realidad los derechos humanos al agua y al saneamiento, así como para garantizar la aplicación del ODS 6 y de todos los objetivos relacionados con el agua de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible, no basta con celebrar una conferencia intergubernamental de las Naciones Unidas dedicada al agua cada 46 años. A este ritmo no alcanzaremos los objetivos que los Estados y la comunidad internacional se han fijado.
Además, el mundo se enfrenta a riesgos interconectados que amenazan con provocar una policrisis. Los riesgos relacionados con el clima -que están directamente vinculados al agua- son una de las mayores amenazas futuras a las que se enfrenta el mundo. Las crisis alimentarias se multiplican, las fuentes de energía alternativas en la mayoría de los casos no son posibles sin agua, la seguridad del planeta está amenazada, la inflación galopa, mientras crece la presión sobre los recursos y el agua se convierte en objeto de codicia y tensión.
De hecho, el agua es una cuestión geopolítica de primer orden, incluida una cuestión de paz. La gestión de este recurso vital, único y necesariamente compartido es un tema que la comunidad internacional no puede ignorar.
Los más vulnerables ya están pagando un alto precio por la incapacidad de los Estados para traducir en políticas y acciones los compromisos adquiridos en el marco de los derechos humanos al agua y al saneamiento (A/RES/64/292), la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, el Acuerdo de París sobre el Clima, la biodiversidad y las conferencias regionales, así como la COP de la CMNUCC. Además, la financiación no está llegando a las personas sobre el terreno cuyas vidas han empezado a cambiar drásticamente. Los Estados y la comunidad internacional no están a la altura de las amenazas que se ciernen sobre el planeta y la humanidad.
El efecto mariposa está coordinado por la Secretariá Internacional del Agua.
Los miembros del comité directivo del Efecto Mariposa
Con el apoyo de:*
* Las opiniones expresadas en este documento no representan los puntos de vista officiales de las organizaciones que presan apoyo financiero.